lunes, 24 de mayo de 2010

Conozca a Venezuela y a los venezolanos.

Héctor Estrada Parada.
Primera parte.
• La belleza “de la mujer venezolana” ha tomado fama internacional, principalmente por haber logrado más de 60 coronas internacionales -que incluyen cuatro Miss Universo y cinco Miss Mundo- desde 1955, cuando Susana Duijm se alzó por primera vez con el título como la mujer más bella del planeta, y quien por cierto, aún a sus setenta y pico de años hace anuncios de cosméticos y ¡da consejos de belleza! La ex Miss Universo Irene Sáez fue alcaldesa de uno de los municipios que conforman la llamada “Gran Caracas”, y además se lanzó como candidata a la presidencia de la República en 1998, en los comicios en los que su contrincante, Hugo Chávez resultó ganador.

• La arepa, una especie de pan elaborado con maíz blanco -hoy en día harina de maíz precocido-, es el plato más popular del país, y se come a cualquier hora y en todas las épocas del año, asada o frita. Confeccionada en forma circular -plana o abultada-, puede rellenarse con casi cualquier ingrediente, desde queso, carne y pollo hasta ensaladas y chorizos. Así rellena, solía llamársele: “Tostada”, pero este vocablo ha caído un poco en el desuso. La "Reina pepeada," con pollo, mayonesa y aguacate, y la "Pelúa" -queso amarillo y carne mechada-, “Dominó”, de caraotas negras con queso blanco rayado, son algunos de los particulares nombres de este plato que suele venderse en las "areperas". Como datos pintorescos: Hay un refrán muy criollo para significar que la Providencia nos bendice proveyéndonos el sustento, y es que “todo niño venezolano nace con su arepa bajo el brazo”. Y la gente orgullosa, que no se deja chantajear laboralmente dice “yo no tengo bozal de arepa”.

• La fe católica es profesada por la mayoría de la población, siendo los venezolanos fieles a sus “Santos “y “Vírgenes”, y la Patrona del país es la Virgen de Coromoto. A pesar de ello, los ritos traídos por los africanos durante la época colonial, mezclados con tradiciones indígenas autóctonas y el propio catolicismo, popularizaron la llamada santería y otras prácticas. El culto a la reina María Lionza, una deidad mítica venezolana, es uno de los más populares, centrándose su influencia y su práctica en Yaracuy, específicamente en la montaña de Sorte.

• El cacao cosechado en algunas regiones de la costa norte del país es calificado como uno de los mejores del mundo, aunque su producción es actualmente bastante reducida. El cacao tipo "Chuao" es considerado como de los más finos del mundo y es usado para preparar postres y bombones. Desde la época colonial, el cacao y el café eran los productos más exportados del país hasta la llegada de la era petrolera, en la primera mitad del siglo XX. Aún se oye decir, al referirse a alguien de muy buena posición económica y social: “Ese es un Gran Cacao”

• En el aspecto turístico, la nación posee variadas bellezas naturales que van desde las soleadas playas de la Isla Margarita y el Archipiélago de Los Roques, en el norte del país -sin dejar de mencionar las excelentes de Carabobo y Falcón-, hasta las ancestrales formaciones rocosas en el sureste, donde se ubica la caída libre de agua más alta del mundo –más de 970 m.-, el Salto Ángel. Por añadidura tenemos la imponente belleza de las montañas andinas, con nieves perpetuas en el Pico Bolívar y la majestuosa extensión de los llanos.

• En el país destaca la "fabricación" de exóticos nombres con diversos orígenes. Algunos padres mezclan nombres o apellidos para bautizar a sus hijos como "Josmar" (José y María) o "Nelcar" (Nelson y Carolina), “Hecsura” (Héctor y Suralva -que a su vez proviene de Suárez y Alvarado-), “Polanaríz” (de Polanco y Arizteguieta), “Layca” (por las abuelas Laura y Carmen). Igualmente conozco a un marabino nombrado Jesús “Chucho” Quintero, a quien sus allegados llaman cariñosamente “Chuqui”

• Otros provienen de la pronunciación en español de palabras o frases en lenguas extranjeras como "Yusneivy" (U.S. Navy) o “Yesaidú” (Yes, I do), “Aydonou” (suponemos que por I don`t know). Abundan en nuestro país los: “Brayan”, “Bripni”, “Eguar”, “Edinson”, “Ronal” y “Yeison”; hasta tuvimos la ocasión de conocer a una señorita a quien su padre, de apellido Monroy, muy orgulloso, le puso: Marilín. -así que como dicen las “pavas sifrinas”: O sea... -

• También son frecuentes aquellos que inician con la letra "Y" como Yubirí, Yorgelis, Yuleizy, Yoniskel, Yolimar, Yormari, Yosmary, Yonder, Yúnior, Yhoni, cuya fonética tiene marcada influencia indígena.
• En décadas recientes se ha visto incrementado el uso de más de dos nombres, así encontramos: Jesús Oscar Darío -personalmente conocemos a uno llamado Jesús Oscar Darío Espinoza Rivas quien orgullosamente coloca donde puede, sus iniciales: J.O.D.E.R.-; Nilson José Luis; Richard José Antonio, y más aún, Andrés Eloy Segundo de la Santísima Trinidad, o bien María Adelaida Josefina de la Divina Pastora (si es Guara), Charlys Clensis de La Consolación de Táriba (si es gochita) y ni hablar de los maracuchos; entonces alguno podría llamarse Nespormuceno Ebertógames Igorvosígler de la Chiquinquirá Camacho Bracho (ría, pero no dude).
• De igual manera un gran porcentaje de féminas venezolanas tiene como segundo nombre Margarita o Coromoto: Yajaira Coromoto, Yolanda Margarita, o una combinación de aquellos: Margarita Coromoto o Coromoto Margarita.
• Es frecuente el uso combinado de los nombres de los padres terrenales de Jesús de Nazareth, tanto para mujeres como hombres: María José o bien, José María -a quienes en la Isla Margarita terminan diciéndoles “CheMaría”, así como a Francisco Antonio, le llaman “Chicotoño”, tal es el caso del cantante folclorista isleño, Francisco Antonio Mata.

2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  2. El presente trabajo se escribió a solicitud de una venezolana que dirige una revista literaria en Chile. la conocí hace poco más de un año en la exposición de libros de la Plaza Bolívar de San Cristóbal. Aun ignoro si fue publicado.

    ResponderEliminar